jueves, septiembre 30

Nesecito un trago

Hay veces en las mi cuerpo me pide a gritos cosas buenas.
Una buena enajenación mental.
Un buen pedo que le eleve por encima de la realidad.
Unos buenos amigos que en solidaridad contigo, beban como si no hubiera mañana.
Unas buenas risas, estúpidas y etéreas que me distraigan y me dejen agujetas en la comisura de la boca y en la barriga.
Una buena canción para el recuerdo de una memorable noche.
Una buena botella de vino que lo tiña todo de rojo burdeos, y que sepa a albariño y a ración de gamba a la plancha.
Una buena noche que acompañe los cánticos en la calle al abrigo de las estrellas.
Una buena sobada que me de la vida que me quita tanto bebercio.
Y una buena resaca.

miércoles, septiembre 22

PC KK

Después de un día de mierda en la oficina, mientras me salía el mensaje de apagar/suspender/reiniciar el ordenador, pensé en una cuarta opción....


Un souvenir de la Plaza Mayor

En ocasiones veo Batmans.
Y me da miedito.
Siempre que paso por ahí está él. Practicando sus poses. Espatarrado. Con esa mirada perdida de superhéroe de tetabrik de vino de mesa. Esa bolsa de deportes cutre a su espalda. Cada vez que paso por la Plaza Mayor, veo a ese Batman ibérico y grotesco, son esas mallas que tienen pinta de no haber sido lavadas a menudo... vamos que se las quita y se hace quemaduras de tercer grado...
Y no puedo evitar pensar "mae mía, ¡hay crisis hasta en el mundo de los superhéroes!"
Cuando le echas unas monedicas, te lanza telas de araña imaginarias con sus muñecas y cambia de postura mientras su barriga embutida en licra azul reverbera con el movimiento.
No he podido aún sacar de mi retina estas imágenes.
Escalofríos de recordarlo.

lunes, septiembre 20

Todo lo que tu quieras

No se si puedo decir que me gustó o no. El sabor que me dejó en la boca cuando terminó "Todo lo que tu quieras" fue agridulce. Cuando me resbalaban dos lagrimones por las mejillas ¡zas! se encendieron de golpe las luces y sinceramente me hizo sentir increíblemente incómoda. Con el mensaje de la película, con el final y por su puesto con la sala.

En algún punto de "Todo lo que tu quieras", los temas se van mezclando en una especie de cajón desastre, donde no soy capaz de asegurar haber entendido los mensajes del film. O directamente si hay mensaje.

He de decir que las casi dos horas de metraje se me pasaron volando. Las historias tan cercanas e íntimas son las que más me atraen. Pero esta historia es muy diferente.

Destaco la valentía de Achero Mañas por echarle huevos y hablar de un tema ninguneado en el cine como el de la paternidad. Ahora, no me queda claro si en la película el órdago a la grande lo apuesta a la maternidad, ya que la niña, Dafne, necesita de su mama para su día a día, parece que si se hubiera muerto su padre, la vida de la niña hubiera continuado sin traumas. Es entendible, ya que los primeros minutos de peli, te muestran el día a día de la nena con su mami, y el padre superatareado por que es un abogado muy muy ocupado. Supermegacliché.

Cuando la madre muere, para más inri delante de los ojitos de la niña (yo aquí casi me muero, cuando la niña es medio consciente del hecho de la muerte, y se pone a llorar y a gritar "mami!!", me jarté a hacer lo propio desde mi butaca), vemos el periplo del padre por conocer más a esa hija, de la que apenas sabe nada, se conciencia para asumir esa ausencia, colmando a la niña con todo aquello que la criatura quiera.

Pero la nena no quiere un juguete nuevo, ni caprichos tan banales. No, ella quiere algo más. Lo que quiere es que papi sea mami. Que se vista de su madre. Que se pinte los labios. En este punto, pienso yo, desde un punto de vista racional, ¿no tenemos la obligación de enseñar a nuestros niños los límites de las cosas y de sus deseos? ¿no es esto parte de la educación? ¿no es quizá un deseo demasiado arriesgado? ¿cuando el juego pasa a ser necesidad? ¿no complica el trauma? Yo creo q sí.

El padre, por supuesto deja de lado sus prejucios (el papel del padre tiene tintes homófobos. Segundo supermegacliché: al que antes llamaba "maricón de mierda", se convierte de repente en su amigüito) por la "felicidad" de su hija. Se transforma en Alicia, la madre muerta. Con maquillaje, pelucón, collar y gorro. Hasta que cae en la cuenta (por que el tutor del cole de la criatura le comenta que quizá se le esta yendo la olla con el tema ya q la nena predica féliz x la escuela q su mama no ha muerto) de que tal vez aquello no tenga los resultados que él soñaba. Más bien lo contrario: le haga más paja mental de la que ya tiene la niña.

En el cajón desastre de temas, a parte del de la paternidad en solitario, padre coraje, bla bla, en el film tb se habla y se denuncia de los prejuicios sociales contra el transformismo y la homosexualidad.

Por si estos temas no fueran pocos, para una historia tan íntima, toca de lejos, hilado con el papel de abogado de Leo, el prota y padre de la nena, el papel de padres divorciados sin derecho a nada una vez firmado los papeles, sin dinero, sin casa y sin hijos. De lejos, una pinceladilla. Una reivindicación sin apenas eco.

¡¡Cuantas cosillas!! Sí, para mi gusto demasiadas... y el tema principal, lo de papa + nena alone in the world, lo resuelve un poco a lo "venga, corre que se nos acaba el tiempo". No me queda muy claro que de repente la niña lo tenga todo claro. En él último fotograma parece que así es, pero la nena solo tiene 4 años... en fin.

No es que no me gustara, es que salí con una necesidad imperiosa de hacer un cineforum con mis amigas, por que mi sensación es que esta peli se coge con pinzas. Tal vez sea el guión, no me parece sólido, tira para un lado, luego da otro bandazo hacia otra lado.

Llorar, lloré, ojo. Pero no por eso es un peliculón, si no que una es mu sensibol, y más si metemos por medio a niñas tan tiernas como Lucía Fernández (Dafne), que te la comes de la cosota q es.

En cuanto a los actores, mira que no me suele gustar Juan Diego Botto, tal vez en "Martín Hache", y reconozco que esta película la medio salva. La niña soberbia, tierna, teniendo en cuanta que tiene 4 años, ole. Y del resto... ni fu ni fa, la verdad. Nawja Nimri me suele gustar mucho, pero esos rizos not, x Tutatis...


lunes, septiembre 13

Crisis nuestra de todos los días...


Es la palabra mágica, ingrediente estrella de de todos los sofritos y las 6 letras que parecen justificarlo todo. Estoy pelín harta del abuso del vocablo, sobre todo por la clase política, que me tienen hasta las reales zamburiñas.

Y es que la tal Crisis, que vino el año pasado de visita, y como una suegra molesta o un tío lejano borrachuzo y manguisuelto, se quedó sin avisar, poco a poco, como quien no quiere la cosa. "Venga, un día más, y me voy" y así hasta el infinito y más allá.

La tal Crisis, llamemos aquí Cris por la confianza más que manida, después de tanto tiempo con nosotros (y lo que le queda, por que me ha dicho que está tan a gustico), me dice que qué necesidad tiene ella de irse. Que ninguna. Que ahora es feliz, por que es capaz de imponerse, que es más ella, que ahora se le respeta... Así que dejando a una servidora ojiplática, no me queda más remedio que decir:

- Cris, en serio, deberías mirarte esa soberbia...

Pero Crispis es lo suficientemente tozuda como para pasar tres kilos de mi, levantar el mentón y menear la melena mientras piensa "fuck you, darling!". Y si Cris quiere, todos nos jodemos. Ha cogido protagonismo y se lo tiene de un creído... angelico, si en el fondo es una petarda que le encanta verse en el papel couché.

Y es que Cris todo lo que toca, lo descojona. Lo peor de todo es que no acabamos de reaccionar. La Cris nos impone, nos asusta. Nos enmudece.

La huelga del 29 de septiembre es una mera pantomima, el cuento de la lechera. La gente está como seca por dentro, nadie cree a nadie, nadie confía en nadie... Y en este caldo de cultivo, Cris hace su agosto, obvio.

Como ejemplo ilustrativo del aborregamiento de las masas, ayer mismo, en el vuelo A Coruña - Madrid, un retraso de 2 horas, hizo que los pasajeros, entre los que me incluyo, estuviéramos a punto de amotinarnos, por que no había explicaciones, solo había tiempo perdido, cansancio, mala hostia, y esa sensación desagradable de que para las compañías aéreas somos lo último en su pirámide de intereses.

Aguantamos como benditos, la verdad, en una cola de dudosa creación, los nenes llorando, los padres resoplando... y ese olor a tigre que se va generando; un tema, oiga. Y aún así, calladicos. Tristemente acostumbrados a que lo normal siempre son los retrasos..

Una vez en el avión nos dicen, que por si no hubiéramos tenido suficiente con la horita tonta en el aeropuerto de A Coruña, nos iban a regalar una hora más tontorrona una vez embarcados por que de las 4 pistas que tiene Madrid, solo había una operativa... y que hasta que nos concedan el honor de aterrizar daremos unas cuantas de vueltas por el espacio aéreo cañí para echar la horica y conocer lo que viene siendo Madrid desde el aire... por fin empezamos a quejarnos, a decir algunos con acento gallego "eso no me lo creo yo, hoooombre" "desvengonzadiños son, coño!" "nos vamos a quedar sin aire que respirar, joder!"

Y después de dos horas extras haciendo nada en el avión, ni un triste caramelo, ni te ofrecen agua para los gaznates secos de las quejas... C'asco de compañía. Y no voy a a decir el nombre por que son todas igual de cutres salchicheras. Confirmado: El negocio del aire también está tocado por la Cris.

Afortunadamente me quedé KO una vez me senté en mi sitio. Supongo que tanta espera, el cansancio acumulado y las risas que nos echamos cuando el comandante nos agradeció que hubiéramos elegido su compañía, bla bla nos comunicó que ¡¡por fín!! aquello se ponía en marcha hicieron mella en mi cuerpo serrano. Las risas y los aplausos coparon el eco seco del avión.

Y es que las penas con risas, son menos...

viernes, septiembre 10

Después de las vacaciones...

Así toy yo también, más pelá que el toto de la Barbie
¡Qué grande es Forges!

Chistecillo

Como hoy me aburro como una mona, una bola de paja corre triste y solo por la oficina al mas puro estilo del lejano oeste y estoy contando los minuticos que me quedan para irme a zampar, estoy cubriendo de gloria mi abandonado blog ;P

PD.- Ojo, que el dibujo no es mío. Lo encontré navegando por inten-né ;)

La talla 38



Es una cosa mala, chica. Qué necesidad tiene una de malograrse la entrepierna... ¡Ninguna! Que después una anda como si fuera una morcillica de Burgos, con sus carnes prietas amenazando con escapar de la tortura textil, espatarrada, escocida perdía, caminando como las muñecas de Famosa, o peor, como un Robocop con almorranas; y es sentarse y ponerse una a ver la constelación enterica, siendo de día incluso. Todas las estrellas del mundo desfilan ante una mientras los ojos se convierten en dos asteriscos al más puro estilo Manga *_*

Una vez aposentada, las gomillas del pequeñísimo tanga que te has endosado ese día que estrenas esos imposibles y maravillosos vaqueros talla 38, se queda por encima del vaquero, y encima del mismo, la hucha, Usease, la rajita der culete, o donde la espalda pierde su bendito nombre.

Una sabe, por que son muchos años con las carnes sueltas, que no hay remedio a eso, te has puesto esos vaqueros nuevos y duros como el esparto, con la idea de estar monísima de pie, sujetando, tal vez, una copa, y un cigarro, sonriendo para demostrar al mundo ese lema que haces tuyo "yes, we can". El tema de sentarse es momentáneo, para engullir unas tapas, quizá, y seguir con la ruta nocturna.

Mientras la cerveza corretea juguetona por la garganta y con una mano buscas la última tapa de chistorra, un michelín se rebela y salta por encima de la cinturilla del vaquero. Te quedas quieta, mientras piensas "oh, dios mio, que nadie haya visto este salto mortal sin red". Nena, la gente está a su bola, pero piensas que todo el mundo está pendiente de que estalles de un momento a otro.

Por fin las copas, y bailas (poco, los movimientos son limitados, pareces una Barbie con parálisis) y cantas (poco, por que hay q coger aire, y con esos vaqueros ni puedes apenas para respirar, como para cantar), y bebes (poco, que luego una se mea, y con el calor que hace quitarse los pantalones es una misión imposible, una sabe que ya no hay salida: no podrás volver a ponértelos) y te largas a casa deseando quitarte esos malditos pantalones que no han hecho otra cosa que apretarte el chocho.

¡¡Avistando Vikingos!!

Yo os declaro marido y... ¡marido!

Mis niños se me casan, aaaains, q se me hacen grandes...

Me encanta echar la vista atrás y ver todo un camino recorrido juntos, compartiendo el paisaje, disfrutando de cada parada, Madrid, Londres, Almería... llorando, riendo, borrachos como cubas, distraídos, tristes, cantando, bailando... Y siempre ahí. En la distancia. En el tiempo. Siempre ahí.

Dentro de poco comenzareis de nuevo vuestra historia como marido y marido, y yo, amigos míos no podré decir otra cosa más que ¡olé! (me llevaré el kleenex en el bolso por que fijo que aquí vuestra amiga echa un par de lagrimicas... que una es mu sensibol ;P)

Y es que no hay nada mejor como hacer las cosas cuando y cómo uno quiere, ¿verdad? :D

Muchísimas felicidades, ♥ ♥ ¡¡os deseo lo mejor!! ♥♥

Nos vemos en Octubre, no me lo perdería por nada del mundo ;)

ALL YOU NEED IS LOVE!

(Chicos, me siento mu identificada con las damas de honor que bailan con las gafas de sol como método contra la resaca, de la q nos vamos a agarrar el vieeeernesss!!)